Regalo Eterno
viernes, 9 de enero de 2009
Aunque ciertamente existen muchas razones por las cuáles estar agradecidos a Dios, hoy me gustaría compartir principalmente tres de estas:
· Dios con nosotros
“La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y lo llamarán Emanuel, que significa Dios con nosotros.”
(Mateo 1:23)
El propósito de recordar el nacimiento de Cristo en estas fechas, (tal como el mundo no cristiano lo celebra, como hemos discutido en ocasiones anteriores, e incluso algunos cristianos también…), traer la buena noticia de que, a pesar de la tragedia del pecado, Dios aún permanece con nosotros.
· Dios por nosotros
“Hoy les ha nacido en la ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor.”
(Lucas 2:11)
Vino a estar con nosotros porque ésta era la única manera de morir por nosotros; es decir, lograr en nuestro favor lo que no podíamos hacer por nosotros mismos: salvarnos.
· Dios en nosotros
“Y yo le pediré al Padre, y él os dará otro Consolador para que los acompañe siempre: el Espíritu de verdad, a quién el mundo no puede aceptar porque no le ve ni le conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará con ustedes.”
(Juan 14:16-17)
Dios quiere morar en nosotros por medio de su Santo Espíritu, para que seamos transformados y anunciemos al mundo que en Jesucristo tenemos el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de la gracia que Dios nos dio en abundancia” (Efesios 1:7,8).